Para abrir un negocio en la Red has de pensar en grande. Por Ángela Méndez.
Consigue que tu sitio cautive a la primera, que sea fácil de
utilizar y que genere seguridad y confianza para fidelizar a tus clientes.
Un mercado con 7.000 millones de clientes. Ése es el
potencial que te brinda una empresa online. Una modalidad de venta que según
Luis Zimmermann, director de la Asociación Española de Economía Digital, “supone
un 2,2% del PIB español”.
Para operar en el ‘e-commerce’ hay que aspirar a todo,
atreverse a probar y afrontar retos.
Pero no hay que engañarse: una tienda en la Red no es sólo
abrir un escaparate y un canal de compra de tu producto. El e-commerce implica
un cambio en la mentalidad y en el modo de trabajar, porque este medio de venta
abre tu negocio a todo un ecosistema internacional en el que las restricciones
las pones tú. Por eso José Manuel Mas, director del Máster en digital business
de ESIC, explica que “para operar en este campo hay que pensar en grande. Ésa
es una de las tareas pendientes de los emprendedores españoles porque ante la
magnitud del panorama nos amedrentamos y no nos atrevemos a probar y a afrontar
nuevos retos”.
Aprovechar las ventajas
Los beneficios del e-commerce son muchos. Uno es la
posibilidad de generar autoempleo y crear microempresas que actúen en sectores
en claro crecimiento. Además en estos momentos, como apunta Mas, “para muchos
empresarios y emprendedores abrirse al mercado internacional es casi una
necesidad”.
La competencia está a un clic, así que cuida la facilidad de
uso y la confianza de los compradores
Yago Arbeloa, presidente de la Asociación de Inversores y
Emprendedores por Internet (AIEI), señala que “para los empresarios que ya
tienen una tienda offline, acceder a la Red es añadir un punto de venta global
y abierto 24 horas. Mientras que para los que sólo operan online, además de
estas ventajas, tiene una más: una inversión mucho menor para la puesta en
marcha de su negocio; por tanto, menor riesgo”.
Para introducirse en el comercio en Internet, Arbeloa
comenta que “es fundamental formarse en todas las materias que implica la Red,
como el software, las herramientas de recomendación, SEO, SEM, social media,
fidelización de clientes y logística”.
Philippe Lardy, fundador y CEO de Ydral E-business
Solutions, empresa especializada en el desarrollo de soluciones tecnológicas
para el área de comercio electrónico, comenta que “lo primero es observar el
mercado para fijarse un objetivo, averiguar si es viable y asegurarte de que
tienes los recursos económicos, técnicos y, sobre todo, humanos para ponerlo en
marcha y darle continuidad”.
La seguridad y los plazos de entrega son aspectos vitales
para mantener a tu clientela.
Pero, además, Lardy hace especial hincapié en que en el
e-commerce lo más importante es tener todo bien organizado para dar lo que has
prometido a tus clientes en el plazo acordado. En este punto coinciden todos
los expertos y recuerdan que es esencial cuidar la logística, la seguridad de
los sistemas de pago, los plazos de entrega y los sistemas de devolución.
Fallar en uno de estos procesos supone dañar tu imagen, y en un mercado con
tantos competidores las segundas oportunidades casi no existen. “La competencia
está a un clic de distancia, y debes cuidar la facilidad de uso de tu web y la
confianza de tus clientes”, dice el fundador de Ydral.
Dónde moverte
En cuanto a las plataformas de comercio electrónico, Mas
afirma que “la web sigue siendo la reina. Las demás, como el mobile commerce o el
social commerce hay que aprender a manejarlas, pero es recomendable entrar en
ellas de una en una, porque no se pueden hacer bien las cosas en todos los
medios a la vez”.
Respecto al aumento de los negocios que operan sólo en
Facebook, el profesor de ESIC avisa de que “si la web es como un sistema feudal
en el que debes rendir pleitesía, sobre todo al señor Google, Facebook es un
arrendamiento en el que el terreno no es tuyo y no puedes negociar con un
casero que impone sus condiciones”.
Fuente: www.expansion.com